Angelita, ejemplo de pujanza y trabajo
Los vecinos del barrio Santander en la comuna 4 de Bucaramanga, desde hace seis años acogieron a Ángela Rosa Vallo Sánchez y a su familia; ellos son de Coloncito, Estado Táchira de Venezuela y llegaron a Colombia en busca de mejores oportunidades.
Ángela o “angelita” como muchos de cariño la llaman, cuenta que desde que llegó a éste país la han hecho sentir muy bien; sus vecinos han sido amables y la han orientado cuando tiene alguna inquietud.
“Llegué a la casa de la señora Nubia quien ha sido un ángel en nuestra familia; nos ha ayudado mucho y desde que estoy acá en Colombia he trabajado con ella. Además, nos ayudó a buscar empleo para mi esposo porque al principio para él fue difícil, ya después se hicieron los trámites y se logró el Permiso por Protección Temporal (PPT) y gracias a Dios ahora trabaja en una ferretería”
En las mañanas Ángela trabaja en la cafetería del colegio Francisco Paula Santander y en las tardes en un negocio de comidas rápidas ahí en el mismo barrio Santander; su jornada empieza desde las 5:00 de la mañana y termina alrededor de las 10 de la noche todos los días.
“Uno de los momentos más felices que he pasado acá en Colombia es el grado de mi hija como enfermera, está trabajando y quiere seguir sus estudios para ser bacterióloga”.
El día miércoles es el día de descanso, Ángela aprovecha para salir con su esposo y sus dos hijos Daniel y Angeline, a conocer lugares turísticos del área metropolitana de Bucaramanga, comer helado y visitar alguno de los parques de la “ciudad bonita”.
“Extraño de Venezuela mi familia, mi casa y le doy gracias a Dios porque acá he encontrado colombianos que nos han brindado su apoyo para salir adelante”.
Ángela camina por las calles del barrio Santander, siempre va con una sonrisa en su rostro y cuenta que es feliz en este lugar por la tranquilidad del barrio y la calidad humana. Ella es una migrante ejemplo de pujanza y trabajo con un mensaje de hermandad y empatía entre todos sin importar el país de donde sean.